El 5 de julio del próximo año 2017, las Nuevas Poblaciones de Sierra Morena y Andalucía cumplirán el 250 aniversario de la promulgación del Fuero de Población por el que fueron fundadas. Y por ello los 16 municipios que comparten tan singular origen fundacional se disponen a celebrar su efeméride.
Dicho así, parece a priori tratarse sencillamente de un señalado y simultáneo cumpleaños, sin embargo, la intención, los objetivos y los fines con los que estos pueblos fueron creados por el Gobierno Ilustrado del Rey Carlos III, así como por las vicisitudes tan peculiares y únicas con las que nacieron, merecen trascender lo que sería una fiesta de cumpleaños para ser una conmemoración que aglutine y haga honor a toda la verdadera dimensión de aquel Gran Proyecto para la reforma económica y social de España.
Bajo esta perspectiva ya no se trata solamente de una fecha, sino de un acontecimiento histórico, del ideal de la Ilustración Española, del esfuerzo y aspiraciones de la monarquía Borbónica por sacar a la nación de la decadente situación en la que se encontraba a principios del siglo XVIII, y de la identidad cultural de unos pequeños y nuevos pueblos que fueron el centro de atención de todas las miradas de las potencias europeas por sus modernas medidas de progreso, adelantadas a su tiempo.
Para comprender y poder interpretar en toda su dimensión el origen de las Nuevas Poblaciones, habrá que hablar del siglo XVIII, de la monarquía Borbónica en España y muy especialmente del Rey Carlos III que es considerado en estas poblaciones como un auténtico Pater Patriae; del Siglo de las Luces y de los ilustrados españoles (Feijoo, Campomanes, Olavide, Múzquiz,......, de las corrientes culturales y de los aires de reforma que llenan la Corte española, del pulso político entre el Antiguo Régimen y los reformistas ilustrados, de la sociedad, de los más de 8 mil colonos centroeuropeos que fueron reclutados para poblar estas tierras, del impacto que produjo el proyecto en la política y sociedad española del momento, los alcances y repercusiones del proyecto y de sus resultados.
Constituye esta conmemoración una oportunidad para:
Resulta paradójico que el Fuero de Población de 1767 para la creación de Nuevos Pueblos bajo un régimen legislativo y administrativo propio, que contemplaba postulados tan modernos como: la enseñanza primaria obligatoria y gratuita para todos los menores (niños y niñas) del pueblo llano [Art. LXXIV del Fuero]; o que la mujer fuese considerada tan útil y tan capacitada como el hombre para trabajar, no sólo en las habituales tareas domésticas sino también en la agricultura e incluso la industria [Art. XXXIII y XLIII del Fuero], y sin embargo, a pesar de la abundante historiografía sobre este Proyecto, apenas se conozca y haya pasado 250 años inadvertido para la gran mayoría de la sociedad española.
Los 16 municipios, que llegaron a aglutinar un total de 60 nuevos asentamientos, entre pueblos y aldeas, (de los que hoy quedan aún en pie 48), son el testimonio vivo de aquel modelo que materializó con muchísimo esfuerzo y oposición el Gobierno Ilustrado del Rey Carlos III, para que una necesaria reforma económica y social se irradiara por toda la nación para la prosperidad y felicidad de todos sus súbditos. Siendo los herederos de aquel legado fundacional e ilustrado, las Nuevas Poblaciones se disponen a conmemorar su singular origen, trascendiendo de nuevo el ámbito local para dar a conocer un hecho histórico poco frecuente y que merece ser dado a conocer por su importancia en la Historia de España.